La adopción por el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas de una resolución sobre Venezuela el 27 de septiembre de 2018 evidencia la preocupación creciente de gobiernos a nivel global por la crisis humanitaria y de derechos humanos en el país, señaló hoy Human Rights Watch. El Consejo de Derechos Humanos es el principal órgano intergubernamental dentro del sistema de la ONU que se ocupa de abordar violaciones de derechos humanos.
La resolución manifiesta una profunda preocupación por las violaciones de derechos humanos en Venezuela. Afirma que el gobierno venezolano debería abrir sus puertas a la asistencia humanitaria para hacer frente a la “escasez de alimentos y medicamentos,” al “aumento de la malnutrición” y al “brote de enfermedades que habían quedado erradicadas o bajo control en América del Sur”. Asimismo, solicita a la Alta Comisionada para los Derechos Humanos de la ONU que presente un informe exhaustivo sobre la situación en Venezuela al Consejo durante su 39.º período de sesiones, en junio de 2019, y que provea una actualización oral en los períodos de sesiones de marzo y septiembre.
“La histórica resolución del Consejo de Derechos Humanos sobre Venezuela marca un punto de inflexión para el pueblo venezolano y pone el foco en la crisis humanitaria y de derechos humanos en el país”, expresó John Fisher, director en Ginebra de Human Rights Watch. “La adopción, con amplio apoyo, de esta resolución permitirá que el Consejo de Derechos Humanos preste atención a la trágica situación en Venezuela y presione al gobierno de Maduro para que aborde la crisis humanitaria y los abusos de los que es responsable”.
La resolución se aprobó con un voto de 23 contra 7 y 17 abstenciones. La resolución recibió el apoyo de delegaciones de todos los continentes.
Fue presentada por 11 gobiernos de América—Argentina, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Guatemala, Guyana, Honduras, México, Paraguay y Perú— que han sido claves para que se incluyera la situación en Venezuela en la agenda del Consejo de Derechos Humanos. Más de 40 Estados Miembros de la ONU apoyaron la resolución.
En junio, la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos difundió un informe que describe abusos como detenciones arbitrarias y ejecuciones extrajudiciales, torturas y la brutal represión de opositores. La ausencia de instituciones democráticas independientes ha propiciado en el gobierno una cultura de impunidad absoluta.
Durante su discurso inaugural en el actual período de sesiones del Consejo, la flamante alta comisionada, Michelle Bachelet, manifestó que desde la publicación del informe su oficina había seguido recibiendo información sobre violaciones de derechos humanos en Venezuela, que incluyen desde muertes por malnutrición o enfermedades prevenibles, hasta detenciones arbitrarias, maltratos y restricciones a la libertad de expresión. Instó al Consejo a que adopte todas las medidas a su alcance para actuar ante las violaciones de derechos humanos en Venezuela.