Los países latinoamericanos tienen una cultura tradicionalmente machista, con tasas bajas de participación laboral de las mujeres, aseguró el secretario de Hacienda y Crédito Público, Arturo Herrera Gutiérrez, en la Facultad de Estudios Superiores (FES) Acatlán, y precisó: México tiene un índice aún menor que el promedio regional, con 47 por ciento, frente al 57 por ciento de Argentina.
Al participar de manera virtual en la XXI Semana de Actuaría y de Economía, organizada en esa entidad académica de la UNAM, indicó que si nuestra nación tuviera la tasa de participación de ese país de América Latina, alrededor de cuatro millones más de mujeres se incorporarían al mercado laboral, lo cual tendría implicaciones para la vida familiar y “un impacto brutal en el crecimiento de la economía nacional”.
Consideró que solo ese 47 por ciento de las mexicanas están en la Población Económicamente Activa, porque no se ha logrado construir las condiciones donde se sientan seguras, aceptadas, tengan una oportunidad para incorporarse al mercado laboral.
Lo anterior, explicó, tiene dos implicaciones: una de equidad, porque en ese sentido no hay piso parejo en nuestro país, y otra de crecimiento, toda vez que una parte importante de nuestro capital humano no se ejerce.
En el acto, el director de la FES Acatlán, Manuel Martínez Justo, dio la bienvenida al titular de Hacienda, y se congratuló porque la entidad universitaria, la de mayor matrícula en la Universidad Nacional, fuera la anfitriona de la interacción con tomadores de decisiones.
Arturo Herrera Gutiérrez hizo ver que desde la víspera de la COVID-19 el país enfrentaba los desafíos que marca una sociedad desigual y la falta de crecimiento económico; sin embargo, añadió: “Soy hijo de la instrucción pública, y tengo un compromiso con ésta, por lo que estoy convencido que los anteriores retos, los resolveremos con educación”.
Previo a la emergencia sanitaria, continuó, se consideraban cuatro elementos como problemas principales: la falta de inversión pública; la escasa recaudación del 13.8 por ciento del PIB; algunos indicadores débiles, por ejemplo, el hecho de que solo 37 por ciento de los mexicanos posean cuenta bancaria, y que la mayoría de la actividad económica se maneje en efectivo.
Y, finalmente, la restricción en el mercado laboral, donde no se ha podido integrar a más mujeres.
Herrera Gutiérrez fue enfático al expresar que el confinamiento ante la contingencia sanitaria trajo consigo un impacto económico inmediato; no obstante, aclaró: “en México hemos aprendido a lidiar con éste, y el país se está adaptando a vivir con la COVID, aunque esté por debajo de su operación”.
Se preguntó entonces “¿cuándo regresaremos a una situación similar previa a la enfermedad?, y respondió:
“Hay varias posibilidades, pero la más viable es cuando tengamos un control de la COVID, y eso se dará cuando tengamos la vacuna, con ello la situación cambiará”, concluyó.
Fuente: UNAM