Las falsas expectativas generadas por la publicidad durante la temporada decembrina conducen a conflictos emocionales que pueden derivar en un estado de depresión, afirmó un especialista de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
El académico de la Facultad de Psicología, Hugo Sánchez Castillo, explicó que estas expectativas son moduladas por el sistema dopaminérgico que involucra a ciertas estructuras del cerebro que permiten tener una sensación reforzante (placentera) antes de un evento.
“Estos días los acompañamos con grandes reforzadores, particularmente en Navidad, fecha en la que hay comida que no se consume todos los días, lo que genera expectativa, sensaciones placenteras y una liberación hormonal”, dijo en un comunicado.
Indicó que durante esta temporada la gente se predispone y presiona para conseguir ciertas condiciones que piensa, materializarán su felicidad. Pero al no siempre conseguirlas se puede presentar un episodio de depresión y en casos extremos, suicidio.
El también presidente de la Sociedad Iberoamericana de Neurociencia Aplicada señaló que al hacer un recuento de los logros en Año Nuevo y darnos cuenta que no se cumplieron ciertos propósitos, aparece la frustración. “Así, en un día que debería ser de los más felices, hay una ruptura emocional”.
Al respecto, añadió que la felicidad no es la única emoción existente y el problema aparece cuando se cree que ésta debe permear todo.
“Si aceptamos que somos individuos que cometemos errores, al momento de concretrar o de comparar lo que hicimos y lo que no, aceptaremos todo con mayor facilidad”, concluyó.
Fuente: Notimex