Un grupo de expertos, encabezados por el especialista en nutrición, Adam Drewnowski, de la Universidad de Washington, emitió el informe “Los 50 alimentos del futuro”, una lista conformada por ingredientes de origen vegetal que son nutritivos y generan un menor impacto en el medio ambiente.
El documento elaborado por especialistas en sostenibilidad, agricultura y sabor de la empresa Knorr y el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF), consigna los retos que enfrenta el sistema alimentario global y ofrece una solución tangible al recomendar el consumo de 50 alimentos que ayudarían a promover un modelo de alimentación más sostenible para el mundo.
Nopales, lentejas, espinaca, quinoa, raíz de loto, frijoles marama, cacahuete de Bambara, fonio, kale, patatas dulces indonesias (cilembu), destacan en la lista de los ingredientes recomendados, que crecen y están disponibles en un gran número de países y pueden ser el acompañamiento o el principal elemento de las comidas diarias.
Asimismo, se sugiere que sean agregados o sustituyan a otros alimentos y se usen para crear nuevos tipos de platillos. El objetivo es aumentar la ingesta de estos alimentos para ayudar a mejorar la salud de las personas y el planeta.
En un comunicado, la organización WWF México señaló que consumidores, chefs, comerciantes, corporaciones y responsables de formular políticas pueden y deben participar en promover un cambio de los alimentos que se eligen para cultivar, vender, cocinar y comer.
Al hacer pequeñas modificaciones que apunten al consumo de una mayor variedad de alimentos de origen vegetal, se puede ayudar a transformar y reparar el sistema alimentario mundial.
Subrayó que comer más plantas en lugar de carne y otros productos de origen animal es mejor para las personas y el planeta, por lo que se recomienda cambiar el tipo de alimentación. Los alimentos de origen animal no se incluyeron en la lista.
Los alimentos de origen vegetal son densos en nutrientes, asequibles y atractivos, a la vez que tienen un impacto menor en el medio ambiente que los alimentos de origen animal.
De acuerdo con el informe, cultivar plantas es mejor para el medio ambiente que animales de granja, ya que ocupan menos espacio, usan menos agua, emiten menos gases de efecto invernadero y son mejores para el suelo.
“Los 50 alimentos del futuro” contienen una variedad de macro y micro nutrientes, y la intención es alentar a las personas a comer una variedad de estos alimentos además de o en lugar de los que se consumen actualmente.
La lista consta de muchos tipos diferentes de vegetales, una variedad de fuentes de proteínas de origen vegetal y una amplia gama de granos y cereales de todo el mundo.
Esta combinación de alimentos permite tres cambios: más verduras, más fuentes de proteínas de origen vegetal para reducir las de origen animal, y una variedad más amplia de fuentes de carbohidratos en lugar de las que se comen comúnmente.
Además, muchos de los 50 alimentos mencionados se pueden cultivar en una variedad de entornos, ya que son altamente adaptables dado que las condiciones climáticas extremas son cada vez más comunes en el mundo.
El informe aporta datos de diferentes estudios que muestran por qué la urgencia de variar lo que se compra, cocina y come.
Por ejemplo, el Informe Planeta Vivo 2018 de WWF demuestra que el tamaño de la población de la vida silvestre disminuyó en un 60 por ciento a nivel mundial entre 1970 y 2014, y que el sistema alimentario es el principal impulsor de la pérdida de biodiversidad.
Para 2050, se prevé que la población aumentará a nueve mil millones de personas a las cuales se debe alimentar en un planeta de recursos limitados. Por ello, los tipos de alimentos y las formas en que se cultivan y producen deben cambiar.
En total, la agricultura representa alrededor de una cuarta parte de todas las emisiones de gases de efecto invernadero, de las cuales aproximadamente el 60 por ciento se debe a la agricultura animal.
Asimismo, el 75 por ciento del suministro mundial de alimentos proviene de solo 12 especies de plantas y cinco de animales. Apenas tres alimentos (arroz, maíz y trigo) constituyen casi el 60 por ciento de las calorías provenientes de plantas en toda la dieta humana.
El informe indicó que a pesar de que se han descubierto entre 20 mil y 50 mil plantas comestibles, solo entre 150 y 200 son consumidas regularmente por los humanos.
Depender de un número tan pequeño de plantas y animales para la alimentación está relacionado a una disminución en la diversidad de plantas y animales en la naturaleza. Este es el resultado de un daño al ecosistema natural, señaló.
Advirtió también que cultivar los mismos alimentos repetidamente, práctica conocida como monocultivo, agota los nutrientes y deja el suelo vulnerable a la acumulación de plagas y patógenos, que generan la necesidad de fertilizantes y pesticidas que, cuando se usan en exceso, pueden dañar la vida silvestre y afectar los sistemas de agua.
La dependencia en una pequeña gama de alimentos afecta negativamente la salud debido a que aporta una limitada variedad de vitaminas, minerales y macronutrientes y una falta de fibra, concluyó.
Fuente: Notimex