El amanecer recibió a los migrantes centroamericanos, que con cobijas en el piso y sus mochilas con las pocas pertenencias que contienen sirviendo de almohada, despertaron en el Parque Central dispuestos a continuar su marcha.
Lavando una mamila con un cepillo de dientes, la señora Asisa Coca atiende a su hijo de dos años de edad para prepararlo en este camino, a fin de conseguir un empleo que le permita salir adelante, ya sea del otro lado de la frontera norte o aquí mismo en México.
Provenientes de Ocotepeque, Honduras, logró llegar con su hijo a esta ciudad fronteriza ayer por la tarde “con la ayuda de los mexicanos, con los víveres y todo, nos han apoyado bastante y por Guatemala también y todo así hemos ido sobreviviendo”.
Lavándose los dientes con el agua embotellada que regalan, algunos hombres se rasuran en seco y se preparan para avanzar tras esta noche que pasaron en el parque, así como otros migrantes más que pernoctaron en el parque Bicentenario, soportando las mismas condiciones con la esperanza de llegar a Estados Unidos.
Un grupo de los migrantes centroamericanos que salió en caravana la víspera de Ciudad Hidalgo, prefirió pernoctar en estos parques, pese a que las autoridades instalaron en el centro de exposiciones Expo Mesaoamericana un albergue temporal con diversas garantías.
Fuente: Notimex