Periodistas, abogados y actividades llevan meses sufriendo el acoso de las autoridades estadounidenses y mexicanas mientras trabajan en la frontera entre ambos países, según el informe publicado el 8 de febrero por The Intercept.
En los últimos meses, oficiales mexicanos han pedido los pasaportes a periodistas y fotógrafos, en una ocasión admitiendo que eran “para los americanos”, según el informe.
El periodista español Daniel Ochoa de Olza y el freelance de nacionalidad canadiense y estadounidense Kitra Cahana vieron denegada su entrada a México desde Estados Unidos el pasado mes de enero.
Algunos periodistas, como el freelance Manuel Rapalo, han sido acusados por oficiales en la frontera de ayudar a migrantes a cruzarla. Rapalo, que ha informado en la frontera para Al Jazeera, ha sido interceptado en varias ocasiones en el aeropuerto internacional de Washington DC. En la última, un oficial de aduanas le advirtió que podía ser retenido por su “línea de trabajo”.
El senador Ron Wyden (D-OR) ha abierto una investigación sobre la conducta de estos oficiales de aduanas. “Sería un abuso de poder de la administración Trump y los servicios de aduanas registrar a las personas en base a sus creencias políticas o por ser periodistas”, ha afirmado Wyden.