Al pan pan y al vino vino

agustin1Miente la persona que diga que nunca ha escuchado o leído alguna columna de opinión en contra de aberraciones que se cometen en contra de grupos minoritarios. Miente quien diga que no ha deseado por lo menos un “que se lo lleve el diablo” cuando nos enteramos que un hombre golpea a su mujer. Miente la persona que diga que no desea que por lo menos encarcelen al sacerdote o pastor que comete pederastia. Miente quien diga que no le recuerda a su progenitoria a los victimarios que ultrajan inocencias.

Después de un largo tiempo vuelvo a retomar la escritura porque no puedo callar sobre lo que está sucediendo con tantos asesinatos de niñas y niños en conflictos religiosos, geográficos y politicos. Cuando nacionales en Ucrania o Siria asesinan a niñas y niños se les  llama criminales y la sociedad pide se persiga y castigue de acuerdo a las leyes. Asimismo, cuando grupos en Irak decapitan inocentes por ser cristianos, también son criminales asesinos e igual deben ser llevados a la justicia.

Lamento el doble rasero y la hipocresía de personas de nuestra comunidad que no han alzado la voz para denunciar los asesinatos de los hasta ayer 447 niñas y niños que han fallecido en Palestina, según la UNICEF, víctimas del enfrentamiento del grupo terrorista Hamas y el Estado de Israel.

En las redes sociales circula un video de un niño palestino llamado Ahmed, de apenas nueve años de edad y se escucha decir “Ya no sabemos qué es jugar, ni sonreír”. También se conoce lo escrito por el periodista de NBC Ayman Mohyeldin que fue testigo de un ataque israelí perpetrado en una playa de Gaza que causó la muerte a cuatro niños que jugaban al fútbol.
Mohyeldin publicó que eran todos primos hermanos. Y publicó también sus nombres y sus edades: Ahed Atef Bakr, 10 años, Zakaria Ahed Bakr, 10 años, Mohamed Ramez Bakr, 11 años. Ismael Mohamed Bakr, 9 años.
Los pueblos judío y palestino están condenados a coexistir y compartir fronteras, por lo tanto ¡Basta de muertos! Porque el costo humano es lisa y llanamente excesivo. También, basta de hacer víctima a Israel, basta de hacer al islámico o de otra religión terrorista en potencia. Y en esto de denunciar ¡Basta de hipocresía! Y terminaré con una frase muy de mi pueblo, En esto de llamar criminales asesinos “No sólo a Pancha le apesta el culo”.